Welcome to Hurgada
Y tomamos rumbo al mar Rojo, el objetivo de este viaje. La verdad que quería hacer submarinismo y no me fue posible, pues justo antes de volar a Egipto volviendo de Londres tuve un problema de presión en el oído y no se me había pasado completamente, así que no pude bucear en esta ocasión.
Nuestro primer destino fue Hurghada. Nos alojamos en Bel Air Azur resort, pues al estar en Ramadán queríamos un todo incluido para no tener problemas. El resort era antiguo, pero estaba muy bien, tenía una piscina enorme, la playa con hamacas, barra libre de bebidas, conexión con otros hoteles, animación, actividades por la noche, y un pizza corner por si en algún momento del día querías comer y no podías. Decidimos descansar un poco allí y tomar el sol que nos apetecía un montón.
En la punta del muelle del hotel había muchísima fauna para poder hacer snorkel e incluso por la tarde delfines.
Sunset safari
Una de las excursiones que hicimos una tarde fue hacer un Safari. Contratamos la excursión con Get your Guide, ( que aunque he contratado tours con ellos otras veces en este en concreto tuvimos problemas).
Fuimos finalmente con un conductor privado al desierto y la excursión consistía en una vuelta en camellos (solo había uno y decidimos no hacerlo porque las condiciones del camello no las vimos claras) tiendas beduinas que no había ninguna, y conducción de quads por el desierto que es lo que hicimos durante las 2 horas que duró el safari. Fuimos con Mokhtar y la verdad que lo pasamos muy bien. Parecía que estuviéramos en la luna por el paisaje. El final de la ruta llegaba hasta unos acantilados donde empezó el atardecer y la verdad que fue precioso. La vuelta fue increíble, aunque si es verdad que había mucho polvo, e íbamos tapadas con un pañuelo y gafas transparentes para protegernos.
Snorket trip
Aunque estaba triste porque no me quería perder el buceo del mar Rojo, le di la vuelta y me sentía super afortunada de estar disfrutando de unas vacaciones en ese paraíso llamado Mar Rojo y al menos podía hacer snorkel y disfrutar de uno de sus tesoros más ocultos, el fondo del mar.
Contratamos la excursión con bote pequeño para que fuéramos pocos turistas en el mismo hotel y por la mañana nos llevó hasta el puerto andando que estaba a 5 minutos de nuestro hotel donde cogimos un barquito.
Hicimos el tour por las islas Giftun. El color del mar tenía un color azul precioso, nada que envidiar a ciertas zonas de Caribe y no sabíamos que existía algo así tan cerca de casa. Pero por debajo del agua es aún mucho mejor, el coral tiene un color precioso y hay muchísimos peces de colores y mucha variedad. Hicimos 2 paradas diferentes e íbamos con un instructor y la verdad que fue una maravilla.
Orange Bay
La comida la hicimos en el mismo barco, y prepararon a bordo una variedad de platos exquisitos de arroz, pescado, carne, pasta, vegetales... El plato que más me gusto fueron unas berenjenas a la barbacoa con tomate y ajo. Lo sirvieron aparte de bonito como si fuera un bufete y podías comer en cualquier zona del barco. Nosotras escogimos en la proa tomando el sol y fue un verdadero placer estar en pleno mes de abril como si fuera verano de esta guisa.
La última parada fue Orange Bay, que la verdad es que es un paraíso. Sí que es verdad que es una isla preparada únicamente por y para el turista, pero en ese momento no había mucho turismo y pudimos disfrutar de columpios, hamacas en un mar de color turquesa y una zona donde tomar el sol con tumbonas, y bares para relajarse. Un final de parada muy bonito, la verdad que a no ser que esté muy masificado es una de las zonas que las recomiendo porque no te imaginas que en Egipto exista algo así.
Noches en Hurgada y transporte a Marsa Alam
Las noches en Hurgada estábamos mayormente en el hotel, pues había actividades y espectáculos y si no podíamos ir al hotel de al lado que había discoteca para mover un poco el esqueleto.
La última noche en el hotel vimos un espectáculo de acrobacias y en el hotel de al lado un show de danzas egipcias donde había un chico con una falta que estaba 5 minutazos dando vueltas sobre si mismo sin marearse jugando con el traje típico y una serie de platos de rafia.
Para irnos a Marsa Alam nuestro siguiente destino le pedimos al conductor que nos llevó al desierto si podía llevarnos y fue así como conocimos a Ismael, una gran persona.
Ismael
Ismael es una gran persona. Nos llevó a la hora que queríamos a Marsa Alam que estaba a 5 horas en coche de Hurgada. Él estaba en pleno Ramadán y aun así nos llevó. Durante el trayecto, aparte de ver una espectacular puesta de sol desde el coche, descubrimos que durante esta época que hay gente que no puede ayunar, se pone en la carretera y una vez puesto el sol, regala en nuestro caso zumos y dátiles.
Ismael también nos contó que los dátiles es lo primero que comen porque ayuda a preparar el estómago para comer después de tantas horas sin hacerlo. Y también trajo con el unos pastelitos fritos de dátiles que hizo su hija y los compartió con nosotras. Realmente un gesto precioso y los pastelitos eran deliciosos. Fue muy, pero que muy agradable y por eso os dejo su teléfono aquí por si lo queréis contactar: +20 100 5632986. Y llegamos a Shams Alam.