Ölüdeniz

La ciudad costera

En Olüdeniz estuve 2 noches y el alojamiento escogido por su calidad precio que tampoco había muchas opciones fue el Sunmed Lodge, unos bungalows muy correctos con el típico desayuno turco incluido.
El pueblo en sí, no fue el que más me gustó, aunque probé el pide de queso y huevo que puedes encontrar en todo Turquía y está muy bueno, varios restaurantes, y carteles graciosos con muñecos hinchables que te dicen que entres con un juego de aire interno. 
Fuera de la zona de la playa, la verdad que no me pareció una ciudad muy limpia. Pero la playa merece ser vista y disfrutarla.

 

La playa

La playa de Olüdeniz es una playa preciosa de color turquesa, pero desgraciadamente la han adaptado tanto al turismo que pierde mucho. La playa grande, el agua es preciosa, pero está llena de barcos para los tours con figuras y luces, aparte de los estands donde venden los billetes. También puedes encontrar decoraciones como la puerta de buda que da al mar, que esa sí que a mí particularmente me pareció preciosa.
La zona por la que es famosa esa parte de la Riviera turca, es la lengua de arena que se puede apreciar desde el aire, porque desde la playa actualmente la han explotado tanto y hay tantos Beach Clubs, lleno de sombrillas y hamacas que ya no te das cuenta de su forma. Es una pena que esté tan explotada, pero aun así continúa siendo preciosa, tiene un color verde esmeralda espectacular y divide el mar en la zona de la laguna. Puedes nadar tranquilamente porque es como un lago, el agua está tranquila no hay corriente y puedes nadar de lado a lado porque en el horizonte hay rocas o playa.  
En la zona de la arena, las hamacas llegan a tocar el agua y hay mucha gente. Si quieres disfrutar de la playa, la mejor opción es coger una hamaca que sale a unos 12€ todo el día. También tienes servicio de bar y restaurante que va aparte. Y sí, hay todo lo que necesita un turista para pasar un día entero en la playa e incluso puedes encontrar un Starbucks. 
Aún así, realmente es una playa muy bonita y diferente, y merece la pena visitarla. Aunque si puedes ir fuera de temporada te ahorras esa masificación que es lo que te hace verla con otros ojos. 

Funicular

Una de las actividades más famosas por hacer en la zona es tirarse en paracaídas, puedes verlos mientras disfrutas de la playa durante todo el día. Para hacerlo hay que coger el funicular, pero también es una de las atracciones turísticas por excelencia, subes a 2000 m de altura y francamente no es apto para gente con vértigo, pues en mi cabina había una mujer que tenía y lo pasó fatal durante todo el trayecto que no os voy a mentir dura unos 20-30 minutos. Conforme vas cogiendo altura las vistas son increíbles, ves perfectamente la lengua de arena y en mi caso subí al atardecer, por lo que fue espectacular. 
En el funicular haces una primera parada a los 1200 por si alguien quiere bajar y sigues hasta arriba. Arriba es increíble, es el punto de salida de los paracaidistas, y si subes para ver el atardecer aún puedes ver como sale alguno. Es un deporte que me impacta, pues correr hacia el vacío me impresiona mucho. 
Justo para la puesta de sol se termina el horario de tirarse y la pista pasa a ser un mirador del atardecer. También hay un bar donde se puede tomar algo e incluso un restaurante un poco más arriba con el que hay que subir con un telesilla como de una estación de esquí. Lo recomiendo mucho subir, si hay un día claro las vistas son inolvidables.

Fethiye

Fethiye es una de las ciudades recomendadas de la Riviera Turca, aunque gente local, me había aconsejado saltarla. Al estar al lado de Olüdeniz invertí una mañana para poder ver las tumbas llamadas Amyntas Rock Tombs que son muy bonitas, recuerda un poco Jordania porque están excavadas en las rocas.
También di un pequeño paseo por la zona del centro, que como en todas estas ciudades, lo bonito del ambiente y los restaurantes son a la hora de cenar. Pero sí, es un centro bonito también con un pequeño bazar donde puedes encontrar de todo, especies, ropa, imitaciones, y las famosas calles con los paraguas que encuentras en todo el país. 

En definitiva, esta zona es bonita, pero muy turística. Sí que es verdad que en plena temporada hay demasiada gente, y que se lo han cargado un poco. Aun así si disponéis de tiempo la playa es muy bonita y la experiencia del funicular al atardecer para mi es un must.